1. TRABAJADORA.- Compara al Reino de Dios a una mujer que trabaja en la casa, que pone levadura en la mesa y prepara el pan para la familia (Lc.13:20-21), Por tanto, nada más lejos de la mujer que el espirítu de comodidad, la pereza y la vida fácil y relagada. En el alma de toda mujer campea la capacidad de sacrificio y servicio.
2.- CUIDADOSA, ATENTA Y SOLICITA.- Así como una mujer barre la casa, busca por todas partes para encontar esa moneda perdida, así es Dios Padre con nosotras, hasta encontrarnos. (Lc.15:8-10). Son características propias de la delicadeza femenina.
3.- AFECTIVA Y COMUNICATIVA.- Así como esa mujer se alegra de encontrar la moneda perdida y hace partícipe a sus vecinos de su gozo. Así Dios Padre nos hace patícipes de su alegría, cuando recobra un hijo perdido. (Lc.15:8-10). No olvidemos que nosotras necesitamos mucho más el afecto que las razones y las cosas materiales. A través de la afectividad podemos entrar en el mundo intelectivo.
4.- ESPOSA PREVISORA.- Con el aceite de su amor y fe sale al encuentro del esposo. Así debemos nosotras ser con Dios- (Mt.25:1-13). Toda mujer, debemos tener previsión de cuanto se necesita en casa.
5.- INSISTENTE.- La mujer es presentada aquí como modelo de fe insistente, hasta conseguir lo que quiere. (Lc.18:1-8). De esta característica son testigos nuestros esposos, pues saben que nosotras conseguimos todo a base de insistencia.
6.- SERVICIAL Y GENEROSA.- Marta y las buenas mujeres, que le seguían, sirven a Jesús con delicadeza y amor, poniendo sus bienes al servicio de Jesús. (Lc.10:38-42, Lc:8:1-3). Es porpio de la mujer la generosidad, nosotras nunca medimos nuestra entrega, simplemente la damos.
7.- FELIZ EN EL SACRIFICIO.- Como la madre al dar a luz a su hijo. (Jn.16:21). El sacrificio lo tenemos incorporado en nuestras vidas, nacemos con un cuota de aguante mayor que la del hombre.
8.- HUMILDE Y OCULTA.- Como esa viuda que pone en la colecta del templo lo que tenía para vivir (Mc.12:41-44; Lc.21:1-4). ¡Cuántas cosas, cuántos detalles ocultos, hacemos en nuestras casas y nadie lo ve! Sólo Dios nos recompensará.
9.- DE FINA SENSIBILIDAD.- Derrama el mejor perfume a Cristo. (Jn.12:1-8). La sensibilidad es una de la facetas femeninas. Sin nosotras la mujeres, el mundo sería cruel, le faltaría esa nota de finura. Nosotras vamos derramando nuestro mejor perfume en el hogar.
10.- FIEL EN LOS MOMENTOS DIFICILES.- Allí estaban las mujeres en Calvario, cuando Jesús moría. (Jn.19:25). ¿Dónde estabán los valientes hombres, los apóstoles decididos, los que habían sido curados?. Allí estaban las mujeres, pues cuando nosotras amamos de verdad, amamos hasta el sacrificio.
Para Jesús, la mujer tiene la misma dignidad y categoría que el hombre. Por eso, Él rechaza toda ley y costumbre discriminatorias de la mujer, forma una comunidad mixta en la que hombres y mujeres viven y viajan juntos, mantiene amistad con mujeres, defiende a la mujer cuando es injustamente censurada...
Somos personas creadas por Dios, espirituales y destinadas a la vida inmortal. Va en contra de nuestra dignidad y destino convertirnos en objeto de placer, esclavas del capricho, de la vanidad, de la moda o figuras meramente decorativas de la casa.
Dios nos ha capacitado a través de nuestra naturaleza femenina. El cuerpo y el alma femeninos están hechos naturalmente para la misión sagrada y específica de trasmitir la vida.
DIOS TE BENDIGA MUY RICAMENTE...!!!
Enviado por Sonia Ching
