Romanos 5:2b
y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios
Pensamientos del Día:
El mundo busca esperanza. En una campaña presidencial reciente, el cartel que simbolizó la frustración y la desilusión de Estados Unidos con la antigua administración fue resumida en una foto del candidato Obama con una palabra engalanada con colores brillantes en la parte de abajo: "Esperanza". Esperanza de cambio; esperanza de un mejor mañana; esperanza de progreso. Escoja usted.
Pienso que el mundo busca un futuro y por lo tanto la esperanza provoca muchos movimientos - ya sean campañas presidenciales, revoluciones o avivamientos. Creo también que por eso es que tenemos un gran problema con la droga y las adiciones del alcohol - muchas personas han perdido la esperanza en el futuro.
Como hijos de Dios, tenemos una verdadera esperanza - no en palabras o lemas, sino en el sacrificio que Jesús hizo por nosotros en la cruz. Hebreos 10:23: "Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió." Sabemos que no importan nuestras circunstancias - Dios está en control y todas las cosas obran para bien. (Romanos 8:28: "Sabemos, además, que a los que aman a Dios, todas las cosas los ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
El tercer "beneficio de la Salvación" es la esperanza - no una esperanza vacía, sino una edificada sobre las promesas del Señor Dios Todo Poderoso y el sacrificio de Su hijo, Jesucristo.
Preguntas para Reflexionar:
1 Timoteo 6:17: "A los ricos de este mundo manda que no sean altivos ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos." ¿Dónde ha puesto usted su esperanza? ¿En su cuenta de retiro de 401 k? ¿En el valor de su casa? ¿Su trabajo y carrera? ¿Y su salud? Como todos sabemos, nuestra seguridad puede cambiar sin avisar. Pongamos nuestra esperanza en el único digno - nuestra "esperanza de gloria" - el Señor y Salvador Jesucristo.
fuente: La Liga del Testamento de Bolsillo