(Pero ... ¿me he preocupado por comprenderlos?)
¿Sabes?
Un padre siempre va a querer lo mejor para sus hijos, a menos que sea
una persona muy desquiciada. Si tu padre te ha tratado mal, tal vez sea
porque él no conoce al Señor. Si es así, él mismo tiene problemas
mayores. Si tu padre te abandonó, es porque él mismo cayó en desgracia.
Pero lo normal es que tu padre reaccione a favor de ti.
Es
necesario comprender a los padres. No mires tú el regaño del papá. No
mires tú esas reacciones negativas. Piensa que ellos te tuvieron en sus
brazos, te han cuidado, alimentado. Ellos trabajan por ti. Ellos se
preocupan de que tengas ropa, casa, comida, que tengas una profesión.
Ellos quieren lo mejor para ti.
La gran mayoría de los padres se
han sacrificado por sus hijos. ¡Cuántos de los padres se abstienen! No
se compran ropa muy a menudo. Hemos sabido de esposos que tienen
problemas con las esposas, porque ellos quieren que ellas se compren
ropa ¡pero ellas no quieren por darle al hijo o a la hija la
preferencia! "El hijo primero", o "la hija primero". Ellas prefieren
usar los zapatos viejos, o la ropa vieja. Prefieren comprarse ropa
barata, porque hay que comprarle al hijo o a la hija lo mejor.
Muchos
padres quizás están fracasando. Les ha costado controlar a sus hijos,
les ha costado educarlos bien. Y tienen su esperanza en que sus hijos
puedan encontrar el camino. Que amen al Señor.
Poniéndonos en el lugar del otro
"¿He
intentado yo comprender a mis padres?" Filipenses 2:4 dice: "No mirando
cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los
otros." –Yo soy hijo y lo quiero todo–; pero pongámonos en el lugar del
papá. Él tiene que ordenar el presupuesto, tiene que gobernar su casa,
él tiene que ordenarlo todo. El tiene una responsabilidad, y más encima
si no soy el único hijo ... Pongámonos en su lugar. Él tiene que
enfrentar uno y mil problemas. Aveces tendrá más problemas que ti. Él
también es hombre y es débil, y pasa por grandes tristezas. Pongámonos
en su lugar. Comprendámoslo cuando anda malhumorado. Algo malo le habrá
ocurrido. Habrá sufrido o estará sufriendo también.
Pongámonos en su lugar.